31/5/13
Mi gran temor
Voy a volver un poco el tiempo atrás, a recordar esos sueños, esas sombras, esos ruidos que me daban escalofríos. Muchos dirán que estoy loca pero nunca podrán entender lo que era estar en tu casa escuchando pasos, voces, viendo sombras que rondaban por todos lados mientras lloras desconsoladamente en un rincón de tu casa, pero no de tu habitación porque te daba miedo.
Si, esa era yo, nunca dije nada porque recién tomo el coraje para poder hablar de estas cosas sin llorar ni que se me pongan los pelos de punta.
Recuerdo muy bien cuando todos se iban de la casa, y yo encendía la televisión y la computadora, ponía música solo para no poder escuchar nada, y siempre trataba de hablar con alguien, pero no por teléfono porque me daba miedo, no se porqué pero me daba miedo. Y entonces es cuando empezaba a escuchar pasos que provenían de los pasillos, y bajaba la música y no escuchaba absolutamente nada, veía sombras que se asomaban por las paredes y que no me dejaban tranquila.
Nunca estaba sola, por mas que no haya ningún familiar mio, nunca lo estaba, siempre estaba ella o ellas, no lo se, pero sabia que era una mujer, no se si mala o buena, pero de lo que estoy segura es que me daba miedo y lloraba con una desesperación incontrolable.
Tenia pesadillas horribles y que nunca podía despertar de ellas, me costaba, y una vez que despertaba lloraba del miedo, de lo aterrada que estaba.
Antes de entrar a mi casa miraba la ventana porque tenia miedo de que haya alguien esperándome para lastimarme o simplemente mirarme. Cada vez que caminaba por los pasillos iba cerrando la puerta de todas las habitaciones, de los baños, de todos lados, no quería ver para ningún lado y prendía todas las luces. También dormía escuchando música porque siempre sentía que había alguien detrás mio hablándome y escuchaba un respiro, sentía la presencia de alguien, que no estaba sola.
Toda mi vida escuche cosas pero de chica no le prestaba atención, pensaba que solamente eran ruidos sin sentido, pero no era así, era algo grave.
Empece a estar cada vez mas depresiva, me sentía rara, mal, agotada y veía cada vez mas cosas, iban empeorando los ruidos, golpes, sombras, hasta que decidí contar lo que me pasaba, pero no me sirvió de nada porque me trataron como una loca, una enferma.
Me daban rosarios, me pusieron una virgen en mi pieza y querían llevarme con una persona "profesional" en esas cosas para contar lo que veía. Obviamente que me negué a ir, pero tuve ayuda de la mamá de una amiga, me dijo que cada vez que escuche algo que diga que yo soy mas fuerte y que me dejara en paz, pero la verdad es que me aterraba decir eso, por si las cosas empeoraban.
Entonces decidí no quedarme sola, pero un día no tenia opción y me quede sola, escuchando ruidos, pero tome coraje y dije "Basta... dejame", me puse seria y no llore, no demostré que estaba aterrada, que quería huir. Los ruidos cada vez los escuchaba menos, hasta que no escuche nada mas, pero después de un tiempo volvió por una vez mas. Un día que estaba mucho mas que depresiva, quería lastimarme, y cuando estaba por hacerlo escuche una voz que dijo "No", era una voz rara, una voz muy finita, y mi corazón empezó a latir cada vez mas fuerte, hasta que apague todo y me fui a dormir.
Desde ese día que nunca mas escuche nada, porque me fui de esa casa, y ahora creo que eso que me pasaba quería advertirme de las cosas, quería ayudarme, no quería hacerme daño si no lo mejor para mi.
La conchuda de Andrea
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